lunes

Cuento para una niña de piedra

Hubo una reina que tenía una doncella. La doncella tenía la cabeza de piedra, aunque se peinaba de tal manera que nadie se diera cuenta.

La doncella siempre se alejaba de los hombres porque temía que alguno descubriera lo de su cabeza. Sólo la reina sabía que su doncella usaba peluca.

La peluca tapaba la piedra y el musgo que crecía sobre ella.

No hay comentarios:

Publicar un comentario